
Los buques de carga son un tipo único de embarcación. El diseño y la finalidad de los buques parecen sencillos desde fuera, pero un buen vistazo al interior revela un montón de diseños interconectados y más piezas móviles de las que cabría esperar.
Un ejemplo de estos complejos sistemas es la ventilación. Aunque es importante que haya una buena circulación de aire en cualquier embarcación, es especialmente importante en las que tienen operaciones y alojamientos bajo cubierta.
Los buques construidos para viajes largos, como los cargueros, suelen contener productos químicos y perecederos que deben almacenarse correctamente y requieren una ventilación adecuada. Para comprender mejor los requisitos de ventilación de los buques de carga, hay algunas pautas que debes recordar.
Diferencia entre los tipos de carga
Una de las formas más rápidas de entender la ventilación de los buques de carga es comprender los tipos de carga que pueden transportar. Estas cosas pueden ser variadas, como usted probablemente ha visto cuando se trabaja alrededor del agua, pero la carga en la mayoría de los buques se puede dividir en dos tipos principales:
- Carga Higroscópica - Este tipo de carga es un producto que contiene humedad natural. Esto puede incluir granos u otros tipos de productos agrícolas. Dependiendo del entorno y de la atmósfera desde, hacia o dentro de la cual se traslada, este tipo de carga puede absorber o liberar humedad durante el viaje y puede requerir ventilación adicional para mantener los productos frescos.
- No higroscópica - Este tipo de carga no lleva humedad natural adicional y suelen ser productos sólidos no perecederos. Sin embargo, estos productos pueden ser susceptibles a los cambios de humedad y temperatura, lo que puede implicar requisitos y directrices más estrictos en materia de almacenamiento y ventilación.
Evitar el sudor de la carga
Para los buques de carga que transportan productos no higroscópicos, el sudor del buque, o de la carga, puede provocar muchos daños. Los buques deben ser capaces de adaptarse a las variaciones de humedad y temperatura durante el viaje; de lo contrario, pueden saturarse y dañar la carga. Comprender cómo transpiran los buques es fundamental para llegar a salvo a su destino.
Controle las temperaturas interior y exterior
Para evitar que la carga se vea afectada por la humedad, hay que asegurarse de que la humedad y la temperatura se controlan tanto en el interior del buque como en el exterior. Deben instalarse termómetros e higrómetros en ambas zonas y controlarse de forma rutinaria.
Ventilar el aire
Cuando se trata de ventilar la carga, muchas personas creen erróneamente que basta con ajustar el sistema de ventilación y dejar que haga su trabajo, pero no es así. En realidad, esto puede causar más daños a largo plazo. La ventilación sólo debe utilizarse cuando la humedad supere las directrices recomendadas para la carga transportada. Las discrepancias de temperatura y humedad son más comunes por la noche, por lo que es vital controlar los niveles constantemente..
Póngase en contacto hoy mismo con un abogado experto en derecho marítimo
Está claro que la ventilación de un buque es mucho más complicada de lo que uno podría creer. Esto significa también que hay más posibilidades de que se produzcan accidentes y lesiones entre los trabajadores de un buque de carga.
Si usted es un trabajador de un buque de carga que ha sufrido lesiones en un accidente, ya sea debido al sistema de ventilación o a otra cosa, puede tener derecho a una indemnización por sus lesiones. Los abogados del bufete Kolodny Law Firm pueden asesorarle sobre sus derechos y asegurarse de que recibe la indemnización a la que tiene derecho. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para concertar una consulta.